Pongamos Orden en la Casa!

Simplemente no pude resistir compartir este letrero que me mandaron de regalo mis amigos Aaron y Araceli, el cual viene desde Córdoba, o sea cruzó dos continentes y los dos hemisferios.

Tal bizarrismo es fruto de su placer morboso de elogiar mi ya consabido elgante comportamiento, adornado siempre con mis finas palabras que acompañan las noches de extensos bacanales en mi casa.

Simplemente fantástico!

Guitarra

Que mas se le puede pedir al a vida que un hombre galante, una guitarra y un buen tequila.

Noche de ensueño, de pasión y risas, al compás de rasgar las cuerdas y cantar en duo o... en trio.

Y el mirar profundo de una complicidad eterna, al compás del regalo de tus coplas.

Un amor acariciado por casi toda la vida, en un cortejo, a la antigua, entre risas y picardías.

Y el deseo de tus labios y tus perfumes, y tus ojos claros, y tus manos fuertes con callos por las riendas del caballo, simplemente la estampa de un bandido que me robó mis suspiros y mis anhelos.

Libido

Libido, etimológicamente es el Límite, el Eros.

Que tanto es el deseo, que tanto es el conocerte, y entre tanto....de tanto en tanto entregarme y poseerte, y de tanto en tanto entenderte.

Y de tanto quizás, casi jugando un tanto amarte, y olvidando un tanto..por siempre adorarte

Derechos

Este mundo es definitivamente fantástico...por su arbitrariedad.

Son varios miles de Guerras desempañadas en búsqueda de territorio, Libertad, Igualdad y Fraternidad. Y será que de verdad somos iguales, libres y fraternos?

La cantidad de vidas y litros de sangre derramada por estos ideales llega a un nivel que mi mente, aunque ve la cifra escrita y la entiendo bien, no tengo conscientemente la capacidad de materializar.

Cuando leo que en una batalla histórica existieron cinco mil muertos, me paro frente al espejo, y me trato de imaginar cinco mil igual a mi empilados en la vertical o en la horizontal, y mi mente en la horizontal rompé los límites del horizonte, y en la vertical rompe la orilla de la atmósfera.

No hay respeto a los muertos por la libertad que vivimos.

El mundo es arbitrario en su totalidad.

En un supuesto mundo "Globalizado", la libertad es un simple ficticio. Ya no escribimos cartas, hacemos mails, o pensamientos electrónicos, mismos que son archivados y analizados por miles de terceros; estamos todos mapeados.

Cuando queremos viajar, ahora, virtualmente es el vacueo, analógicamente es simplemente pisar el aeropuerto para perder todos nuestros derechos individuales, puedes o no tener lugar en el avión; uno tiene que llegar a tiempo, no importa si el vuelo se retrasa 5 o 7 horas y tienes que esperar, no hay consideración sí tu vuelo es largo, y tendrás que subir a la estratósfera, sin aire común, " enlatado" como sardina y viajar así por 17 horas.

A veces te fumigan con spray, o tienes que pisar un tapete especial con insecticida. Sino le gustas a alguien que recibe tus documentos te meten en un cuarto y te desvisten. Cuando caminas después de documentarte te van sacando rayos "X" para ver si no vas de mula.

Fantástico, porque con estos exámenes gratis que te hacen en el aeropuerto, en donde se especifican los bultos, bolas, venas, ritmo del corazón y demás funcionamientos orgánicos, te podrían decir, de pasadita, si tienes algun tumor o enfermedad en estado inicial, pero no, simplemente abusan de ti porque traes un perfume o un vino en la bolsa y te lo quitan. Viva la tecnología!

En los aeropuertos he aguantado de todo, pero hoy, simplemente hoy me rebelo, no hay mas.

Como si fuese una mercaduría no lo dejaron embarcar en el avión. Vamos a entendenos, él es uno de mis amigos mas queridos, uno de mis ídolos, que nunca ha tenido pies de barro, de quien he tenido el placer de aprender, y además antes de conocer-le, fui maestra de su hijo mayor, antes de saber de él prometí a su esposa, preocupada por su hijo, titular a su retoño y le cumplí; ese, mi amigo, es un hombre que ha venido 22 a Brasil para negocios... y no conoce la Ciudad.

Ese mi amigo, hace un mes me habló por teléfono, porque por primera vez venía a Brasil solo, sin jefe ni abogado, y se quería tomar un sólo día para conocer São Paulo. Deseaba que yo le explicara la Ciudad.

Mis preparativos fueron máximos, preñados de esperenza.

Es para mi un cálice entre maestro y alumno; una luz de luna clara era que uno de mis ídolos se diera un día de tiempo para pasar conmigo y compartir con el donde vivo.

Mas claro, estaba en la cocina escribiendo una tarjeta para su esposa y su hijo y sorpresivamente me llega una llamada al celular, era El; que del areopuero donde iba a embarcar le despacharon pero de regreso a su casa, porque en el embarque, el putete del mostrador no le recibió su visa de Brasil elaborada hace 5 años. Como camban las leyes como calzones....i

Y ahí queda un sueño, un amor entre discipulo y maestro, en un puto de balcón de aeropuerto, que sigue las reglas de otros putos, que solo reclutan putos.

Por eso, cuando tenga mas dinero voy a hacer una empresa para viajar en Zeppelin.

Para levantar el vuelo en medio del campo, para hacer de México a Brasil, o Brasil-España, entre cuatro o cinco días; para así dar tiempo a pensar que uno cambia de hemisferio, de continente, atmósfera, de flora y de fauna; para dar tiempo a desear. Para tener un cuarto donde dormir en medio del aire, y así evitar también que existan pendejos que pidan papeles, o el peso de las maletas, y que no haya visas; por que en mis Zeppelines, así como van a despegar del campo, van a llegar al campo. Sin política, ni boicotes, ni noticieros, sin rotero.

Y estoy llorando, porque con toda la tecnología y globalización, hoy tiraron de mi encontrarme con uno de mis maestros. Y me doy cuenta que las comunicaciones son solo cuento.

Sólo Dios y yo sabemos cuanto lloré esta noche.

Nada viene de gracia en esta vida, mi hipótesis es que uno se puede expresar en internet, porque los gobiernos ganan mas rastreándonos para decir que tienen"control sobre nuestros pensamientos" que con otras cosas. Ojalá que estos mismos putos analizen este blog, porque son los mismos que nos cagan a nivel mundial con el costo del combustible, controlan a donde vas y que dices, marcan las visas, esos cabrones que se hacen de "tranparentes", que pegan políticos de cuarta y los hacen presidentes.

Pendejos, que rompen hasta lo mas básico de la vida, pensando que ya nos tienen alienados. Porque, sin preguntar, nos tiran los derechos, de velocidad, de ganancia y espacio.

Felizmente habremos algunos "ainda" rebeldes,- que morimos por ideales, é choramos porque um amigo no pozzo embarcar...y não podremos recibir-le em puerto...como pasava-se quando afundava-se um navio...faz quazi V mil anos atrais...

Adoraré en mi rebeldía analógica y digital que vengan aprenderme a mi casa un dia...y recordaré un dia como hoy, que me quedé en puerto esperando un amigo, porque ya simplemente no hay respeto, y pese a los impuestos no hay derechos. Se es tan libre en la carcel que en una casa.

Noche Clara

Llueve y brilla la luna, se ven las estrellas. Una noche fantástica como otras tantas que me ha regalado la vida.

Tan claros son mis pensamientos que la percepción se aguda, y saltan estrepitosas las antenas de transmisión, las luces del avión que va pasando, el centelleo del farol contra las hojas del árbol, la cera de la calle tenuemente iluminada en sus intersticios y mi sensación del paraguas en mi mano cubriéndome del universo.

Tan claros fueron mis pensamientos, que cerré mi paraguas y me expuse al viento, a la lluvia, a la luna, a las estrellas, al farol y a lo inmenso.

Y así, sin protección llegué a casa, levemente mojada, irradiada, enlunada y con la mente clara.

Sarraceno

Hombre de tierra,
Que vienes de La mar,
Ojos sarracenos,
Con mirada de cielo,
De selva, de sertâo,
De estepa,
Y arena.

Hombre de otras tierras,
De otros mundos,
De otros tiempos.

Son tus labios,
La puerta
Al pasado,
Al momento
A lo vivido.

Tu eres mi puente,
Entre lo real,
Y lo divino
Y el olvido.

Soy tu presa,
En tu intimidad,
En tu timidez,
En tu dolor.

Presa de tu varonilidad

Cautiva en tu mirada profunda,
Húmeda y suave,
Oscura y misteriosa,
Como el bosque,
Maderas de arena,
Arena que es piedra.

Mi sarraceno

Y así te anhelo

Hombre de agua y mar,
De música y poesía,
De carne y suspiro,
De vida e infinito.

Mi alma entera escapa,
Entre suspiros,
Que se vuelven aire,
Que se enreda...

En ti, enteramente, mi sarraceno

Me enredo en tus manos,
En tus brazos,
En tus cabellos,
Me enredo en tus labios.

Enredada en ti,
Y en tus besos,
En tu piel y aroma,
Me hiciste hiedra,
De tus pensamientos.

Mañana ensolarada,
Puente de piedra,
Enredado en hiedra,
Del río agua clara y serena,
Que lava y lleva tus penas.

Y caminando,
Ojos sarracenos,
Atrevidos,
Amados,
Besos de mirar.

Hombre de tierra,
Que viene de La mar,
Ojos sarracenos,
No te escondas,
En las dunas de mi deseo.


Y suspiremos,
Y seamos aire,
Y sol, tierra,
Y viento.

Selva, lava, piedra
Pétalos, río
Y besos

Y mas nada.

Que eso es ser vida
Enredados y besados
Ensolarados
Enmaredados
Endesertados
Encariñados
Entrelazados

Mi sarraceno.

La Cruz del Viajero

Érase un caballero, siempre vestido de negro, cabalgando en un corcel negro, parando a descansar solo en las negras noches.

Era Don Fernando un ser enigmático, nadie sabía bien a que se dedicaba, si a la guerra, si al comercio, o era un simple aventurero.

De estampa noble, alto, fuerte, mas de complexión esbelta, llamaba la atención sus cabellos y barba intensamente negros y sus ojos grises con pequeñas tonalidades de verde, acompañados de los rasgos finos de su rostro, sin dejar de ser severos. Tanto su mirada como sus labios de un rojo intenso dejaban escapar de vez en cuando algún rasgo de sensibilidad por el mundo.

Sus paradas nocturnas eran por lo menos dos veces al mes en la villa de Pedraza, donde llegaba directamente a la Plaza Mayor y se hospedaba en la única fonda que ahí se encontraba.

Siempre andaba a todo galope, los cascos de su caballo se oían desde lejos, mas trepitosos aun cuando entraba en la villa con las calles empedradas. Siempre paraba de golpe enfrente de la fonda, dando una jalón en la brida de su corcel que hacía pararlo en dos patas, y de un solo movimiento bajaba del caballo, cayendo en sus dos pies con ágil firmeza, al compás del vuelo de su capa ligera y negra por los aires; su caballo color azabache siempre sudado, vigoroso, con ojos de quien quiere seguir corriendo, quedaba bufando en la entrada, no era necesario ni amarrarlo, tan fiel era el corcel a su amo.

Desde la primera vez que Don Fernando apareció en Pedraza, al llegar a la fonda, pedía la misma mesa, atrás, donde veía la entrada, la cocina, la puerta del fondo, su espalda siempre contra la pared.

Siempre solicitaba el vino de la casa y se acomodaba al guiso, asado o acompastelado de la casa. Desde su lugar de siempre, viendo, apreció a Pepe el dueño o cuidador del lugar, un regordete despeinado de ojos azules y colorado que siempre chanceaba con él, y también veía a la esposa del anfitrión, Pilar, cuidando eternamente de la cocina; ella era terriblemente mora, gitana y atractiva, morena de piel trigueña, cabello negro cacheado y de ojos verde profundo.

Desde su silla, a lo largo de los años, vio como Pilar quedó en estado, y tuvo a su primer y único hijo, Nicolás. Lo vio crecer desde el vientre de su madre, ser arrullado en los brazos de ella al compás de la fervura de sus guisos; le vio comenzar a caminar, a correr por la fonda, hasta que comenzó a hacerse hombre.

A los nueve años, Nicolás ya servía a Don Fernando el vino de la casa, con un respeto absoluto, casi con miedo a ese hombre que llegaba, así nada mas, como el viento y el fuego.

Nicolás había estudiado a Don Fernando pedazo por pedazo. Hombre severo, sabio y gentil a las veces; sin joyas, distinto a la mayoría de los mercantes que pasaban, él solo traía su espada, un anillo de oro con un rubí cuadrado en el dedo anular de la mano derecha y una extraña cruz negra colgada sobre su pecho. Siempre pulcramente afeitado y peinado, despedía un suave aroma como del heno de Pravia recién cortado.

Teniendo Nicolás cerca de 12 años, no aguntando mas la duda le preguntó a Don Fernando

-Me disculpe el señor, mas siempre he tenido curiosidad por saber de que está hecha la cruz que lleva al pecho?

-De clavos para herraduras Nicolás,- contestó gentilmente.

-Me disculpe nuevamente Don Fernando, y por qué?

-Porque es sobre el dolor que uno se abre camino.

El muchacho aseguró la respiración ante la respuesta, bajó la mirada con respeto y se fue a sus labores.

Así pasaron los años. Ya don Fernando tenía algunas canas que adornaban sus sienes.

Un buen día llegó a la fonda y Nicolás estaba muy agitado, atendiendo a todo mundo con rapidez como su tuviera una empresa urgentísima. Con la templanza que caracterizaba a Don Fernando esperó que todo el mundo se fuera, ahí Nicolás, fue corriendo al fogón de su madre y tomó una varita casi totalmente carbonizada, sacó un pedazo de papel que guardaba doblado cuidadosamente en su mandil y se sentó en una mesa a dibujar.

Curioso Don Fernando se levantó y fue a pararse atrás del mozo con la finalidad de ver que estaba haciendo. El muchacho que viera crecer ya contaba casi con unos veinte años, del piel morena clara, cabellos abundantes, lacios y negros…su mirada penetrantemente verde no se separaba del papel.

-Qué dibujas Nicolás-

-Señor, me caso en un mes, estoy diseñando la cama de mi casa-

-Y con quién te casas?-

-Con María, Don Fernando, la hija del panadero-

El hombre sonrió levemente, se quitó la cruz que llevara prácticamente toda su vida al pecho y con cuidado se la colocó en el cuello al muchacho. Nicolás sorprendido se levantó de la silla, mirando absorto la cruz y a los ojos de Don Fernando sin entender que pasaba.

-Nicolás, dijo el viajero,- una vez me preguntaste de que estaba hecha esta cruz, se que te gusta, ahora es tuya, tómala como presente de matrimonio, y recuerda que para ser un hombre debes respetar cuatro cosas, como lados tiene una cruz….. a tus padres, a tu tierra, a tu religión y a la familia que vas a formar, el centro de la cruz, que es donde unen todos los clavos que la forman es el respeto a ti mismo…que Dios te bendiga hijo mío-

Nicolás estaba tan perplejo que no pronunció palabra, Don Fernando se enfiló a la salida de la fonda no sin antes pararse a ver con un aire nostálgico a Pilar que lo miraba fijamente, abrió la puerta, suspiró profundamente, subió a su caballo y partió velozmente sin volver nunca mas ala villa de Pedraza.